sábado, 29 de marzo de 2014

jueves, 27 de marzo de 2014

Historia sexto

Buena tarde, imprimir el siguiente cuadro y pegar en el cuaderno, para el 28 de marzo

Economía Décimo

Buena Tarde, Consultar que es una población economicamente activa, para el 1 de Abril.

Política décimo y once

Buena tarde, realizar un trabajo escrito a mano sobre que es el concejo de Manizales, cuales son las funciones y las personas que lo integran, para el 31 de Marzo

Emprendimiento Sexto y séptimo

Buena Tarde, Consultar las competencias (empresas) para el producto escogido por cada uno y escribir: aspectos positivos, aspectos negativos y como superarlos, y productos de cada empresa (diseños, colores, sabores, texturas,precios), para el 1 de Abril.

Geografía séptimo

Buena tarde, dibujar o imprimir las siguientes caracteristicas de un relieve plano: Valle, llanura y altiplano, para el 31 de Marzo.

Filosofía Once

Buena tarde, realizar un ensayo de media pagina a partir de la siguiente frase: "DIOS ES LA CAUSA INCAUSADA Y CAUSANTE DE TODO LO CAUSAL" Santo Tomas de Aquino, para el 1 de Abril.

Geografía Noveno

Buena tarde, recuerden estudiar para el examen de todo lo visto, 31 de Marzo.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Recuperación Filosofía Once

Fecha de entrega; 2 de Abril de 2014, realizar a mano.

El primer principio Ockhamista: El nominalismo.
El nominalismo trata de una doctrina filosófica que niega la existencia real de los conceptos universales. Simplemente destaca la utilidad de los conceptos que son creados por nuestra propia mente, y quedan reducidos a sonidos o palabras.
Los universales son nombres, no son reales.
Si el primer nominalismo fue el de Roscelino, que hizo de los conceptos flatus vocis, la última forma de nominalismo será la de Guillermo de Ockham. Para Ockham, los universales también son nombres, no son realidades ni tienen fundamento en la realidad: “En el individuo no existe ninguna naturaleza universal realmente distinta de lo que es propio de un individuo”. Ockham suprimirá la realidad de los universales incluso en Dios. Precisamente porque no hay ideas en Dios, no hay universales en las cosas.
Sólo los individuos tienen existencia real.
Ockham comienza por establecer que toda la realidad extramental está integrada por seres individuales. Todo lo que existe fuera de la mente son sólo seres individuales o singulares. Por tanto, únicamente son universales los conceptos y las palabras, porque tienen una significación universal (se refieren a toda una clase de individuos).
La significación universal de palabras y conceptos es algo propio del alma: el universal existe solamente en el alma. Por tanto, el universal tiene existencia: los universales no son sólo palabras vacías, como en el nominalismo de Roselino, sino que son signos inscritos en el alma.
Por otra parte, no podemos explicar de dónde vienen estos signos, ni podemos explicar en qué grado y cómo se corresponden los universales con las cosas. Se trata de una intuición: La intuición es el tipo de conocimiento que nos permite averiguar si una cosa existe o no. La base de todo conocimiento es la intuición del singular. Ockham es un empirista epistemológico en cuanto que conocer es tener noticia inmediata de los que es presente, el singular. El conocimiento intuitivo perfecto es la experiencia sensible y el imperfecto es abstracto, es decir, que no se refiere a la realidad sino a las características comunes que tienen los objetos y nos permiten clasificarlos. Este conocimiento abstractivo no supone una nueva operación del entendimiento, se llama abstractivo porque abstrae (prescinde) de la existencia del individuo o singular.
En este sentido Ockham inaugura el inmanentismo gnoseológico: el conocimiento queda encerrado en el sujeto, y no podemos demostrar que dicho conocimiento se corresponda con la realidad extramental. Este problema hace de Ockham un puente entre la Filosofía Medieval y la Modernidad de Descartes y Hume.
Los universales son sólo representaciones mentales, no son sustancias.
Es universal lo que puede ser predicado de muchos individuos semejantes. La predicación de un concepto o de una palabra respecto de muchos individuos se basa en la semejanza que éstos tienen entre sí. Pero, ¿qué realidad tiene el universal en el alma? Es evidente que no puede ser sustancia. ¿Será una cualidad accidental? A Ockham le parece todavía demasiada realidad. El universal en el alma no tiene más realidad que la de una representación mental.
El concepto o universal es la representación mental de un objeto singular extramental. Es una imagen singular de un objeto singular, pero es aplicable a todos los singulares semejantes. Su única universalidad consiste en su capacidad de significación, en cuanto que es predicable de muchos individuos semejantes. Por eso hemos dicho que el universal en el alma es un signo, en cuanto que significa lo común a muchos individuos.
Si el universal no es real ni tiene fundamento en la realidad, ¿es lícito seguir hablando de universal? Son simplemente formas verbales a través de las cuales la mente humana constituye una serie de relaciones con un alcance exclusivamente lógico. En definitiva, el concepto o universal es una realidad simbólica que nos permite alcanzar conocimientos sobre clases de individuos.
El símbolo oral o escrito, fruto de un acuerdo, es la representación sensible del símbolo natural. El concepto o universal es un símbolo natural (remite al objeto, pudiendo representar una clase de individuos) captado por intuición, mientras que la palabra escrita u oral es un símbolo acordado por convenio entre los hombres (su referencia al individuo es su significado). La relación entre concepto o universal y realidad se explica empíricamente: la realidad por sí sola produce en la mente humana el signo o símbolo que representa. Por ello, Ockham afirma que sólo existe lo individual, lo general sólo se fundamenta en la creación humana.

Mente
Realidad
Universal
Objeto singular
“Mesa” (signo, representación mental)
Mesa (objeto)
La representación mental (SIGNO NATURAL) es válida para todos los objetos singulares semejantes (clases de individuos)
La Suppositio.
La suppositio es la capacidad del signo para ocupar el lugar de un objeto o de una colección de objetos. Se entiende como suppositio la manera cómo los signos se corresponden con el significado. El lenguaje nos permite utilizar símbolos en lugar de su significado, estos términos o signos significan dentro de la proposición, según Ockham lo pueden hacer de tres maneras:

La suposición material: cuando el signo o término se refiere a sí mismo. El lenguaje y sus términos o signos se refieren a las funciones lingüísticas de las palabras no a los significados, ej. hombre, es nombre común, masculino, singular, hombre es bisílabo
La suposición personal: cuando un signo o término ocupa el lugar de un individuo o particular, ej. este hombre corre, mi amigo del alma.
La suposición simple: cuando el signo ocupa el lugar de muchos individuos, ej. el hombre es un animal, todos los hombres son hermanos.
El segundo principio: La navaja de Ockham.
Es el segundo de los principios del Ockhamismo, el primero es la negación de la realidad de los universales. Este principio va a consistir en la negación de las complicaciones de la Metafísica  Escolástica. Así, Mientras que el tomismo pretendía limitar el conocimiento, el nominalismo proporciona una libertad de pensamiento al margen de la fe sin cuestionarla. La metafísica tomista complicaba la explicación de la realidad, por eso Ockham la rechaza. En su lugar prevalece la lógica que es más fiable que la metafísica. Por eso se llama a este segundo principio ockhamista Principio de Economía Metafísica o Navaja de Ockham.
Mediante el término metafórico navaja, Ockham pretende decir que todo lo que no procede de la experiencia sensible se puede podar, es decir, eliminar. Ockham critica a la escolástica porque crea entes metafísicos para explicar la realidad cristiana, lo cual Ockham cree innecesario, porque se debe recurrir a la simplicidad, no a la complicidad. Se debe acudir a la esencia del empirismo, aceptar sólo aquello que captamos por la experiencia y rechazar lo que resulte inútil para la interpretación del mundo sensible.
Si lo real es individual y sensible, no tiene sentido apelar a distinciones metafísicas del tipo materia y forma, esencia y existencia, potencia y acto. El mismo concepto de sustancia no representa más que una realidad desconocida que, de manera arbitraria, enunciamos como conocida. No hay nada que respalde dicha entidad, y al admitirla se viola el principio de la economía de la razón. Otro tanto se puede decir de las nociones de causa eficiente y causa final. En definitiva, Ockham se apoya en una postura epistemológica que le lleva a rechazar principios metafísicos de la escolástica:
La distinción entre esencia y existencia plateada por St. Tomás no tiene sentido para Ockham pues para éste sólo existen individuos concretos.
La subsistencia de la sustancia: es una existencia independiente, solo podemos conocer la sustancia a través de sus accidentes.
La validez empírica de la relación causal: no tenemos intuición de la relación causal. Causa y efecto son actos diferentes del entendimiento.
Este afán de cortar por lo sano es conocido como la navaja de Ockham, y supone una metodología simplificadora, que tiene su formulación en una célebre frase: “No hay que multiplicar los entes sin necesidad” (entia non sunt multiplicanda praeter necessitatem). Con su empirismo explicativo, la navaja de Ockham suprime un gran número de realidades metafísicas, y deja cabida a la Nueva Ciencia que va a cortar con muchas de las creencias de origen aristotélico.
El tercer principio: el voluntarismo teológico.
El voluntarismo teológico es la teoría metafísica que hace depender las leyes naturales no de su carácter racional, sino de la pura voluntad divina. Esto quiere decir que la voluntad es la facultad humana más importante y que reside en la naturaleza divina.
Según el voluntarismo teológico Dios tiene libertad absoluta, es decir, actúa mediante su propia voluntad y crea a los seres como quiere sin tener limitaciones de ideas universales que sirvan de modelos. Gracias a ello Dios, por ejemplo, podría haber hecho que los mandamientos fuesen buenos o malos, es decir, que las cosas son buenas o malas porque Dios lo ha decidido.
Este voluntarismo teológico tienen como consecuencia las siguietes características:
La omnipotencia divina.
La fe nos revela a un Dios omnipotente, que ha hecho lo que ha querido, con tanta libertad que bien hubiera podido querer lo contrario. Por eso no hay orden, ni verdad, ni bien con valor absoluto, sino que todo está ligado a la voluntad caprichosa de Dios.
El convencionalismo moral.
Ockham llega a decir que el odio a Dios, el robo y el adulterio son malos porque Dios así lo ha querido, pero hubieran podido ser buenos y meritorios si Dios hubiera prescrito lo contrario.
Si Dios es omnipotente, le es lícito hacer todo lo que en las criaturas sería pecado, pues no hay nadie que se lo prohíba: Faciendo peccatum, Deus non peccat. Tal afirmación implica la negación de la moralidad intrínseca de los actos humanos. El criterio de la moralidad es extrínseco: la Voluntad de Dios. Los actos humanos son buenos o malos según estén mandados o prohibidos por Dios. Dichos actos no están mandados o prohibidos por Dios porque sean buenos o malos en sí mismos, sino porque, arbitrariamente, así Dios lo ha decidido.
El contingentismo metafísico.
Paralelamente, no hay nada de cuanto existe que, si Dios lo hubiera querido, no hubiera podido ser de otra manera. Así, el mundo creado se ve afectado por un contingentismo radical, nada es necesario, y todo podría ser de otra manera. Todo en el mundo, todo lo real podría ser de otra manera.
El escepticismo gnoseológico.
Incluso Dios puede engañar al hombre y hacer que “conozca” con evidencia lo que ni siquiera existe. La razón humana no puede aspirar a entender a Dios y a explicar por analogía el mundo creado. Por tanto, todo conocimiento puede ser engañoso, lo que lleva a un escepticismo gnoseológico, es decir, a la imposibilidad de justificar afirmaciones verdaderas por parte del entendimiento humano.
Consecuencias del voluntarismo ockhamista.
El hombre, al igual que Dios, también tiende a entenderse como pura libertad, con predomino del querer sobre el deber: Nietzsche propondrá una subjetiva y ciega voluntad de poder como categoría del hombre superior. Ockham sólo pretendía defender la omnipotencia y la libertad divinas, pero sembró en Europa los gérmenes que desembocarían en el agnosticismo y la muerte de Dios.
Razón y fe en Guillermo de Ockham: la crítica a las demostraciones racionales de la existencia de Dios.
Para Ockham, toda la capacidad del entendimiento humano se agota en la representación de seres sensibles singulares. Por consiguiente, de Dios no podemos alcanzar ningún conocimiento racional. Por tanto, ninguna demostración racional de su existencia tiene validez. La existencia de Dios no es objeto de demostración, sino de fe.
No valen los argumentos a priori (San Agustín) ni los argumentos a posteriori (St. Tomás), y tampoco basta con poseer la idea de Dios (San Anselmo), pues muchos la tienen y no admiten su existencia. Cuando Ockham critica las demostraciones tradicionales no intenta ignorar la existencia de Dios, sino subrayar la debilidad de tales argumentos. Tan sólo hay uno que le merece cierto respeto: los seres contingentes tienen necesidad de causas conservantes que coexistan con los efectos, y por eso Dios, entendido como causa conservante del mundo, tiene que existir.
Al negar a la razón toda capacidad de trascendencia metafísica, Ockham pone la base del agnosticismo moderno. La revelación divina se acepta por fe, pero es inaccesible a la razón. Entre la fe y la razón hay una desproporción intrínseca, de forma que los artículos de fe no son racionales, pues es un hecho que a muchos sabios les parecen falsos, y las verdades de fe no son evidentes a la razón, no son demostrables.
La fe es un don gratuito de Dios, y Ockham piensa que no es honrado revestirla de racionalidad. La razón humana posee un ámbito y una tarea diferentes del ámbito y de la tarea de la fe. En definitiva, y frente a St. Tomás, la razón y la fe son completamente autónomas, no convergen en ningún tema, ni siquiera en el tema de la existencia de Dios: Ockham propone una separación radical entre fe y razón, que son conocimientos incompatibles.
Reconociendo que las bases del conocimiento científico son la intuición (experiencia directa que tenemos de la realidad que según Ockham se corresponde con la experiencia sensible) y la demostración racional (partiendo de una afirmación se llega necesariamente a otra aplicando las leyes de la lógica), la fe religiosa solo podría ser demostrada si se tuviera un conocimiento intuitivo de Dios y de la realidad sobrenatural, lo que mediante milagros o predicación no se puede conseguir ya que son conocimientos indemostrables e improbables. Mientras, la razón permite sacar conclusiones demostradas, lo cual no lo permite la fe. Por
En general, supone la afirmación de que no hay que creer en aquello para lo cual no existen suficientes pruebas. En sentido estricto, suele entenderse como la afirmación de que no es posible afirmar racionalmente la existencia de Dios ni su no existencia.
También está Ockham en contra del Averroísmo Latino y la teoría de la Doble Verdad. Los defensores de la doble verdad (verdad de fe y verdad de razón), en caso de contradicción entre ambas, se atenían a la fe (sola fide tenemus).
En el ámbito de la Teología, la razón no está llamada a argumentar, demostrar o explicitar. Ockham estima que la tarea del teólogo no consiste en demostrar con la razón las verdades aceptadas por la fe, sino en dejar clara, desde la superioridad de estas últimas verdades, la insuficiencia de la razón.
Cuando la fe se presenta en el estricto dato de la revelación divina, aparece en su belleza originaria, sin los falsos adornos de la razón. Si el empeño de la escolástica fue conciliar la fe y la razón, el empeño de Ockham consistió en separar ambas fuentes: ni intelligo ut credam ni credo ut intelligam sino credo et intelligo.
El Pensamiento político.
En Avignon, el Papa francés Juan XXII llamó a su presencia a cinco franciscanos. A cuatro de ellos porque su interpretación radical de la pobreza evangélica iba más allá del propio Evangelio. A Guillermo de Ockham, docente en Oxford, para que explicase ciertas proposiciones teológicas.
La solución no llegaba, y los cinco frailes decidieron escaparse y buscar refugio y protección en el emperador Luis de Baviera, enemigo del Papa y por entonces excomulgado. Encontraron al emperador en Pisa, y cuenta la leyenda que allí se postró Guillermo a sus pies y le saludó con la súplica y la promesa que abre este tema: Imperator tu me defendas gladio, ego te defendam calamo. La frase puede ser legendaria, pero no lo es la realidad histórica que origina: en la corte de Luis de Baviera, instalada después en Munich, se inicia el proceso de secularización propio de la Edad Moderna.
En la corte del emperador, Ockham se convierte en paladín y defensor de la autonomía del poder secular frente a la concepción sacral de la autoridad. Al negar la plenitud de potestad pontificia, se opone a la concepción medieval del poder. Los teólogos que han defendido esa plenitud y supremacía, lo han hecho -dirá- por una interpretación abusiva de la Sagrada Escritura. Ockham criticó sin desmayo la teoría conocida como Agustinismo Político, vigente en toda la Edad Media. Según esta teoría, Dios había conferido toda potestad, en el cielo y en la tierra, a su hijo Jesucristo. Jesucristo se la entregaba a su vicario el Papa, que a su vez delegaba el poder temporal en el emperador de la cristiandad. Eso simbolizaba la solemne coronación imperial por manos del Papa, que quedaba en última instancia como juez de los actos del emperador.
Ockham afirmaba que la potestad del Papa era de origen divino, pero sólo en lo espiritual. En nombre de la libertad cristiana exaltará la legitimidad y autonomía del poder temporal del emperador, y se apoyará en la Sagrada Escritura y en los Santos Padres. Empe-rador, reyes y príncipes no tienen superiores en las cosas temporales, y no necesitan aprobación pontificia después de su elección. En realidad, piensa Ockham, es el emperador quien puede juzgar al Papa, y quien debe convocar concilios e intervenir en la designación del supremo pontífice. Esta supremacía del poder secular sobre el religioso tendrá enorme influencia en la historia reciente de Occidente.
Importancia e influencia de Ockham.
El ockhamismo, con su radical separación entre la fe y la razón y su economía metafísica, incentivó la actitud propia de la Nueva Ciencia. Así dio lugar a una actividad científica cuyos representantes más destacados fueron, en el siglo XIV Juan Buridano, Nicolás de Oresme y Alberto de Sajonia. Estos autores, influidos por el nominalismo de Ockham, se muestran muy críticos con la física aristotélica, a la que consideran en exceso metafísica. Posteriormente, Copérnico y Galileo sientan las bases, casi definitivas, de la Nueva Ciencia.
La tajante separación de la fe y la razón también dio lugar a un cierto fideísmo, al pensar que la filosofía nada puede aportar a la fe, y que ésta debe aceptarse aunque sea absurda. Esta idea, presente en Lutero, será uno de los puntos de discrepancia que darán lugar a la Reforma protestante, pues la Iglesia Católica afirma que la fe religiosa no es absurda ni irracional. San Agustín y Santo Tomás habían señalado algunos elementos de la fe explicables por la razón, y reconocían misterios por encima de la capacidad humana de comprensión, sabiendo que algo no es absurdo por no ser entendido.
El nominalismo de Ockham tendrá repercusiones hasta nuestros días. Se explicó en cátedras renacentistas. Influyó en Hume y en todo el empirismo británico, con su actitud claramente experimental y contraria a la metafísica. De los británicos beben los ilustrados y enciclopedistas franceses.
En el siglo XX, nominalistas son los neopositivistas como Wittgenstein y Russell, los filósofos analíticos del lenguaje, los estructuralistas. Para todos ellos, el conocimiento humano deriva de la experiencia, y sólo de la experiencia, sin que se pueda ir más allá.
Lo que realmente quedó de Ockham -resume Carlos Valverde- fue su espíritu: el gusto por la disconformidad con lo antiguo y la crítica filosófica, un cierto agnosticismo y escepticismo metafísico, un fideísmo teológico, un espíritu racionalista que quiere examinar y revisar todo lo admitido, un énfasis en los problemas formales hasta hacer de la lógica una disciplina central, un determinismo caprichoso de Dios sobre el mundo, un contingentismo antropológico, una crítica acerada al papado y una reivindicación del poder temporal, concebido como superior al espiritual. Una legión de discípulos jóvenes entro por esa senda, que se llamó seductoramente vía moderna, por contraposición a la vía antigua, que era la del realismo metafísico, la del agustinismo político y el Derecho natural.

Taller
1.      Realice un cuadro conceptual del texto anterior, lo más completo y concreto posible.

2.      Realice un ensayo de mínimo dos páginas en el cual exponga cada uno de los principios del autor y su aplicación a la realidad de la época y compárelo con el presente.  

sábado, 22 de marzo de 2014

Filosofía Décimo

Buena tarde, realizar el resumen del siguiente video, para el 26 de marzo.


Geografía Séptimo

Buena Tarde, estudiar para el examen, para el 26 de Marzo.

Geografía Sexto

Buena Tarde, imprimir el siguiente planisferio y estudiar para el examen del tema "Habitamos un espacio geográfico" para ek 26 de Marzo.

Filosofía Once

Buena tarde, Consultar la biografía de Pico della Mirandola, para el 25 de Marzo.

Democracia Sexto y Séptimo

Buena tarde, estudiar para el examen de democracia, para el 25 de marzo.

Geografía Noveno

Buena tarde, consultar la definición de erosión, y tipos de erossión cada una con su significado,para el 25 de Marzo.

jueves, 13 de marzo de 2014

Democracia Ocatvo y Noveno

Buena noche, pegar una noticia de política de la actualidad,para el 20 de Marzo.

Historia Octavo

Buena noche, realizar el resumen del siguiente video, para el 20 de marzo.


Politica décimo

Buena noche, consultar la definición de; fascismo, nacionalismo y totalitarismo, para el 17 de marzo.

historia sexto

Buena noche, realizar un dibujo de los siguientes aspectos del paleolítico; dominio del fuego, vivienda y herramientas, para el 14 de marzo

geografía sexto

Buena noche, Dibujar la vestimenta típica y copiar las caracteristicas principales de las costumbres de cada una de las estaciones, para el 17 de Marzo

geografía noveno

Buena noche, imprimir un mapa mundi, donde se muestre las áreas proyectadas de escasez de agua, para el lunes 17 de marzo.

Historia séptimo

Buena Noche, Escribir en el cuaderno las siguientes características principales de los imperios de Africa Tropical, para el lunes 17 de marzo.

El Imperio de Ghana (750-1068) estaba localizado en lo que actualmente es el sudeste de Mauritania y en parte de Malí, al sur del Sahara, en el valle medio del río Senegal. Era conocido con el nombre de Wagadu por sus propios ciudadanossoninké, pero los europeos y árabes lo llamaron Imperio de Ghana por el título de su rey, Ghana, que significa rey guerrero.Wagadu significa tierra de rebaños.


El Imperio de Malí (1235-1546) fue un estado medieval de los mandinka, un pueblo mandinga cuyo núcleo fue la región deBamako, en el África occidental. El imperio fue fundado por Sundiata Keïta. Era conocido por su generosidad y la riqueza de sus gobernantes, en especial Mansa Kankan Musa I. El Imperio de Malí tuvo una profunda influencia en la cultura de África Occidental permitiendo la difusión de su lengua, leyes y costumbres a lo largo del río Níger.


El Imperio songhai, también conocido como el Imperio songhay, fue un estado ubicado en África Occidental. Desde comienzo del siglo XV hasta finales del siglo XVI, Songhai fue uno de los mayores imperios islámicos de la historia. Este imperio portaba el nombre de su principal grupo étnico, los songhai. Su capital era la ciudad de Gao, donde un estado Songhai había existido desde el siglo XI. Su base de poder se hallaba ubicada en la margen del río Níger, en los actualesNíger y Burkina Faso.

martes, 11 de marzo de 2014

Filosofia 11

Buena tarde, recuerden estudiar para el examen de filosofía para el viernes 14 de marzo. Muchas Gracias

sábado, 1 de marzo de 2014

Geografía Octavo

Buena noche, Realizar el resumen del siguiente video, para el 7 de Marzo y estudiar los temas de Ciencias auxiliares de la astronomía y el sistema solar, para el examen.


Historia Noveno

Buena Noche, recuerden estudiar para el examen de la primera guerra mundial e imprimir el siguiente cuadro conceptual y pegarlo en el cuaderno,para el 7 de Marzo.

Historia Octavo

Buena noche, hacer el resumen del siguiente video en el cuaderno, para el 6 de Marzo.

Emprendimiento sexto y séptimo

Buena Noche, terminar el taller de la guia 1, para elmiercoles 5 de Marzo.

Geografía Sexto

Buena noche, pegar una imagen de un elemento natural y una de un elemento cultural, para el lunes 3 de Marzo.

Filosofía Once

Buena noche, consultar quien fue San Anselmo de Canterbury, para el 4 de Marzo